El ataque de la desmotivación

Esta semana hablaremos de uno de los aspectos menos aireados en la vida de una startup, la desmotivación o mejor dicho, aquellos elementos que terminan por medrar nuestro ánimo hasta el punto de llevarnos hacia la desmotivación.

Debo decir que normalmente escribo los artículos cada cierto tiempo y tiendo a escribir varios y programarlos para no tener que estar pendiente de si tengo tiempo de escribir o no. Pero en esta ocasión terminó el mes de Abril y tuve un pequeño atasco en cuanto a mi capacidad para escribir artículos, algo comprensible en una persona que no se dedica a ello ni como profesión ni como hobby. Lo que mas me preocupaba era que no se me ocurría ningún aspecto del cual hablar o directamente de los que tengo en la recamara no me parecían lo suficientemente atractivos para escribirlos en este momento.

Ese pequeño atasque junto con cómo se desarrollan las cosas desde finales de Abril han ido medrando ese ánimo con el que todos comenzamos los distintos proyectos. Al inicio es un subidón de ánimo y expectativas que te hace estar en una pequeña nube en la que realmente parece que nada puede fallar, en donde parece que vas a poder conseguir todo en un corto periodo de tiempo. Después es cuando comienza a pasar el tiempo e inviertes ese mismo tiempo en hacer lo que crees que tendrá éxito, en construir tu prototipo cuan carpintero creando a Pinocho esperando que algún día llegue una luz que le haga vivir.

Pero existe un aspecto que ninguna startup ni emprendedor te mencionará abiertamente, es que, dentro de la llamada "montaña rusa del emprendedor" el peor de los sentimientos es la desmotivación. Ese sentimiento te llega un día sin razón y comienza a cuestionar por qué haces cada acción, cada movimiento, el por qué de la visión... Es lo que muchos llaman la esfinge, haciendo referencia a materializar en un ser todos nuestros miedos, que nos paralizan e incluso podrían hacernos retroceder ante algo. Y es la desmotivación lo que hace que muchos proyectos no terminen cuajando debido a que ataca a las principales preguntas que todo fundador debe hacerse como ¿por qué hago esto? ¿Estaré haciendo lo correcto? ¿Mi equipo es el idóneo para llevar a cabo esta titánica tarea?

No es fácil vencer a la desmotivación, sólo cuando se tiene verdadera convicción en lo que quieres crear y sabes controlar tus sentimientos negativos, puedes vencer y erradicar ese sentimiento que te impide seguir adelante.



Comentarios